Por Odette de Anda
Hoy somos una sociedad más consciente. En los libros esta pandemia se reflejerá como un parteaguas para la humanidad, siendo todos los protagonistas de esta Historia.
Redescubriremos el Hogar ganando espacios, tiempos, afectos y paz interior. En el planeta cambiará el aspecto social pero también el político y el económico.
El Estilo de Vida actual es un cambio de época, y al no tener tanto que necesitar es probable que el consumo vaya disminuyendo. Dejaremos de ser los mismos de antes, presas de los caprichos y del uso de determinadas cosas. Todo lo iremos llenando con nuevos aspectos de nuestra personalidad.
Antes no teníamos el tiempo libre como ahora y hoy se nos da la oportunidad de reflexionar.
Antes buscabamos identidad en una marca X , hoy la buscamos en nosotros mismos.
Antes copiábamos una identificación personal, pero hoy hemos descubierto que somos valiosos y eso es todo un cambio de visión.
Desde el siglo XVIII hasta nuestros días ha ido evolucionando el consumismo y lo ha hecho de una forma muy peculiar, donde el consumidor se ha vuelto cada vez más exigente y se adentró a otros aspectos donde al gusto de la prenda se le sumó la necesidad de saber quién la hacía, bajo que condiciones, etc. Es decir, la historia inmersa detrás de ella.
Después de la pandemia me atrevo a decir que seremos consumidores más selectivos y preferiremos, además de lo antes mencionado, más calidad y menos cantidad vs precio. Y compraremos solamente lo que realmente necesitamos y también, por qué no, lo que nos haga más felices.
Como miembros de la Industria del Vestido, es el momento de resurgir, seducir, reinventarse y ser versátiles. Buscar la verdadera unión de cada elasbón como parte de una Industria, trabajar con creatividad por un mismo objetivo- hablando de fabricantes, diseñadores, proveedores de materias primas, almacenes y todos sus equipos. Ya no solo en beneficio de nuestro consumidor, sino ejercer un esfuerzo adicional con el firme objetivo de mantener la planta productiva para la generación de empleos y prosperidad.
Producir para complacer el nuevo estilo de vida de sus clientes y satisfacer cada segmento del mercado es un reto inmenso. Pero nuestros empresarios lo pueden lograr aplicando la experiencia bien probada en la Industria del Vestido con las situaciones que, en previas y diferentes épocas de crisis, han demostrado superar con éxito edificandose como una gran familia por varias generaciones; sumando esfuerzo, dedicación y entusiasmo.
Si alguien puede tener Más Éxito - cuando regresemos a la nueva forma de hacer las cosas-, ésta es sin duda la Industria del Vestido en todo su conjunto. Confio en ustedes, amigos empresarios, yo se que lo sabrán hacer muy bien.