La aerografía en la moda existe como complemento de la creatividad hecha a mano y no con textiles de estampado de fábrica, por lo que se crea un dibujo personalizado de acuerdo al gusto o hobby de la persona solicitante. Así, es común que cuando se realiza un tatuaje se pide la imagen de acuerdo con la necesidad de satisfacción de la persona que busca este tipo de imagen permanente.
Cuando se realiza un tatuado de la tela se tendrá un diseño único con la imagen requerida, si bien la semiótica de la imagen nos dicta que la fuerza de los signos nos conlleva a la profundidad y fuerza del dibujo plasmado, haciendo de ésta una comunicación de mercado o en la conectividad con la persona que lo observa o que lo tiene.
Personalizar una prenda y hacerla única es parte del ego humano en tener un diseño exclusivo que solo lo tiene quien posee el artículo por mostrar, haciendo de éste un producto con mayor precio, por ser el pintado de un artista o diseñador quien lo ejecutará.
Veremos parte del proceso de ejecución de un saco del Mtro. Miguel Ángel Santana, quien fue el solicitante.
En la figura 1, se aprecia el primer boceto o intento de dibujo. Este se aconseja primero realizarlo en una hoja de papel, después calcular en donde se va a calcar; es importante definir el planteamiento del diseño a ejecutar ya que no se admiten errores por no poder corregirse. Tiene que quedar desde la primera intención.
Se muestra la primera mancha de color blanco de pintura especial para aerógrafo ya que ésta permite pintar sobre tela, metal o plásticos. Es fundamental tener un conocimiento previo de esta técnica así como de su correcta aplicación.
En la figura 2, se observa el primer trazo del caballo; aquí, se sigue utilizando la pintura para aerógrafo pero ahora se incorpora un pincel para acrílico plano, con retoques de pintura blanca con el pincel de aire. Es muy importante recalcar el conocimiento de luces y sombras para un resultado óptimo y poder crear este tipo de pintura exclusiva para clientes exigentes y distinguir una prenda con estilo muy personal.
Es muy importante mojar la tela con agua asegurándote que quede bien humedecida y a continuación, con una brocha aplicar una fina capa de pintura. Si lo prefieres puedes diluir la pintura para que se absorba mejor. También se puede diluir 1-1 pintura- agua para la primera mano.
En la figura 3, se observa el momento de registrar la imagen del auto Ferrari; aquí se sigue usando pinceles más finos y delgados para poder ejecutar a detalle el automóvil. Es imprescindible tener una buena referencia de imagen y lograr lo más fehaciente posible la intención del dibujo, para la completa satisfacción del público conocedor.
Se debe aplicar pinturas que son más opacas ya que son más sencillas de emplear porque cubren con mayor facilidad, mientras que las tintas más transparentes necesitan un estudio del color más profundo. Es fundamental la primer capa ya que esta servirá de soporte para las siguientes aplicaciones, porque sirve de aislante sellador para los colores que se irán incorporando.
En la figura 4, se empiezan a detallar los perfiles más delicados de la obra; la gran ventaja de la aerografía es que se pinta directamente la tela, sin necesidad de diseñar en el ordenador y luego transferirlo mediante algún sistema de impresión. Esto permite una gran rapidez ya que se realiza directamente de la mano del artista a la tela.
Tampoco hay límite de tamaño de impresión ya que todo depende de lo que decida el pintor, así como la satisfacción del cliente. Es menester valorar como arte a este tipo de ejecuciones, ya que se considera como un sello personal de cada cliente, si bien el estampado en tela se puede convertir por nacionalidad, gustos o preferencias individuales.
La aerografía es la pintura ideal para personalizar cualquier tela, ya que resiste el agrietamiento, descamación y astillado mejor que cualquier otra marca.
Con una excelente adhesión en muchas superficies no tradicionales como el vinilo, el cuero, el plástico y el caucho, estas pinturas también son suaves al tacto y excepcionalmente resistentes al lavado en la tela. Formuladas para una fácil pulverización directamente de la botella sin aditivos ni adulteración, estas pinturas acrílicas fluidas inodoras, no tóxicas y a base de agua funcionan bien incluso a bajas presiones, con un mínimo de secado y obstrucción.
Figura 6. Resultado final, se debe sellar con un barniz especial para aerógrafo; éste protege de polvo y lavadas a la prenda así como a la tela la refuerza para cualquier desgaste. Los colores forman una película homogénea de extraordinaria dureza y resistencia transcurrida unas horas tras su aplicación.
El cliente orgulloso de su gusto personal por el automovilismo, el Mtro. Miguel Ángel Santana es considerado uno de los mejores sastres de México, posa distinguiendo la creación del Artista Plástico y Arquitecto Armando Castello.
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